LOS TONOS MAYORES, la ópera prima de Ingrid Pokropek, participa en Berlinale Generation 

 

Un Coming-of-age enigmático y emocionante 

Tras su estreno en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata la película participa en la Berlinale  

LOS TONOS MAYORES, la ópera prima de Ingrid Pokropek, una coproducción entre Argentina y España de Jaibo Films, 36 Caballos y Gong Cine, participará en la sección Generation de la Berlinale, que se celebrará del 15 al 25 de febrero de 2024.

Estrenada en el último Festival Internacional de Cine de Mar del Plata (Competencia Argentina), la cineasta argentina presenta un coming-of-age en el que lo cotidiano se entrelaza con lo fantástico creando así una historia misteriosa y conmovedora.

Centrada en la vida de una joven que se mueve entre el mundo real y los misterios que rodean su existencia, Ingrid Pokropek utiliza la ficción y las posibilidades de la música y el sonido para explorar las experiencias propias de la adolescencia y homenajear la geografía de la ciudad de Buenos Aires, sumergiendo a los espectadores en una aventura urbana llena de intriga y emoción.

 

SINOPSIS

Son las vacaciones de invierno y Ana, una niña de catorce años, descubre que mediante una placa de metal que tiene en su brazo por un accidente que sufrió de pequeña, ahora está recibiendo un extraño mensaje en código morse.

NOTAS DE LA DIRECTORA

Sobre el origen del filme Ingrid Pokropek explica: “Los tonos mayores nace del interés de hacer irrumpir un elemento fantástico en un verosímil más o menos realista. Hay, entonces, una pequeña contradicción: el deseo de filmar una ciudad en particular (Buenos Aires) y trabajar con su geografía, y el deseo de desplegar en ella un enigma extraño, casi sobrenatural. En ese sentido, me atraía además que aquí la conexión con lo fantástico fuera a través del cuerpo. El brazo de una niña como la antena, como el vínculo con un misterio invisible”.

Si bien la constelación familiar reflejada no es exactamente la de la vida real de la directora, la película sí que tiene una importante carga autobiográfica. “Me gustaba que Ana, la niña, viviera en las afueras de la ciudad (tal como viví yo mi infancia y adolescencia) y que fuera el deseo por descifrar el enigma lo que la convocara a viajar constantemente hacia la capital, a estar todo el tiempo desplazándose arriba de un colectivo o de un tren. A esto se suma la decisión de que ella tuviera catorce años, esa edad en la que uno vive con poca plata en el bolsillo, poca batería en el celular, poca capacidad de previsión. Me interesaba esa precariedad del movimiento adolescente. Deambular por una ciudad que uno está empezando a conocer, lejos de casa, inconsciente del peligro”.

Para Pokropek la música también tiene un papel esencial en el filme: “No solamente por una cuestión estética o rítmica, sino sobre todo por su importancia narrativa: es la partitura que la amiga de la protagonista escribe con los pulsos que la niña recibe, la clave para luego poder descifrar el misterio. La música es el vehículo de traducción”.

 

SOBRE INGRID POKROPEK  

Buenos Aires, 1994. Escribió y dirigió los cortometrajes Chico Eléctrico (2021),  Shendy Wu: un diario (2019), Es una ficción de arena (2017) y Si fuera una serpiente (2016). Es productora de los films Trenque Lauquen (2022, Laura Citarella), Clementina (2022, Agustín Mendilaharzu & Constanza Feldman), La Edad Media (2022, Luciana Acuña y Alejo Moguillansky) y Las poetas visitan a Juana Bignozzi (2019, Mercedes Halfon y Laura Citarella). Los tonos mayores es su ópera prima como directora.

 

 

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Eva Herrero / Luca di Leonardo

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